La música clásica también tiene
un espacio en el Festival Artístico y Cultura de la Ciudad de Pachuca. La
Orquesta Sinfónica del Conservatorio Nacional de Música ofrecerá un magno
concierto bajo la dirección de David Rodríguez de la Peña y Anatoly Zatine, en
el Teatro de la Ciudad San Francisco, el próximo viernes 11 de marzo, en punto
de las 19:00 horas.
Organizada por el Consejo Estatal
para la Cultura y las Artes de Hidalgo, esta presentación pretende brindar una
oferta más para llegar al público que prefiere la música orquestal, que se
añade a una serie de excelentes propuestas traídas para los habitantes del
estado de Hidalgo.
Esta agrupación interpretará un
programa integrado por las siguientes piezas: “Obertura Egmont Op. 84” de
Beethoven (1770-1827); “Incidentes Melódicos del Mundo Irracional” (1992) de
David Rodríguez de la Peña; “Concierto de Aranjuez” de Joaquín Rodrigo (1901-1999),
dividido en “Allegro”, “Adagio”, “Allegro gentile”, con la participación de Juan
Carlos Chacón en la guitarra; “El sombrero de tres picos” de Manuel de Falla (1876-1946),
integrada por “Danza de los vecinos” (seguidillas), “Farruca” y “Danza final” (jota),
para cerrar con “Obertura 1812, op. 49”, de P. Ilich Tchaikovsky (1840-1893).
La Orquesta Sinfónica del Conservatorio
Nacional de Música se conforma en la actualidad, con los alumnos de esta
institución que acreditan su formación filarmónica mediante la realización de
conciertos y actividades inherentes a la orquesta. El propósito de la
agrupación es el de proveer a los músicos jóvenes con la experiencia
profesional que les permita incorporarse al inicio de su vida profesional a
diversas agrupaciones orquestales.
Asimismo, la Orquesta constituye
el corazón académico del Conservatorio, pues en la orquesta confluyen alumnos
de casi todas las especialidades impartidas a nivel superior.
La historia de la Orquesta
Sinfónica del Conservatorio se remonta al siglo XIX, pues la institución ha
logrado reunir, desde su fundación en 1876, diversos conjuntos orquestales que
han contribuido en forma decisiva a la vida musical de México.
En 1916 la Orquesta del
Conservatorio se transformó en la primera Orquesta Sinfónica Nacional, bajo la
batuta de Julián Carrillo. Más adelante, y con nuevos integrantes jugó un papel
crucial en la vida cultural de la década de los años veinte, cuando bajo la
batuta de Silvestre Revueltas, ocupó el lugar más importante entre las
agrupaciones filarmónicas del país. A partir de 1947 tuvo otra época brillante
bajo la dirección de Eduardo Hernández Moncada aunque dos años más tarde se le
unió con la Orquesta Sinfónica de México para fundar la actual Orquesta
Sinfónica Nacional bajo la dirección de José Pablo Moncayo.
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