Resulta curioso la manera en que contamos el tiempo; el
tiempo que hemos vivido y el tiempo en el que hemos vivido. Cuando cumplimos
años festejamos la conclusión de un año –yo cumplí 45 en julio pasado, es decir,
celebré la conclusión de mi año número 45 en este mundo y a partir de ese
momento estoy viviendo mi año 46, sin embargo, cuando me pregunta mi edad no
respondo “estoy viviendo mis 46”, respondo “cumplí 45”–; nos aferramos al
tiempo cuya medida tenemos clara y no dudamos diciendo “hoy tengo tantos años,
unos cuantos meses y estos pocos días”.
Pero cuando hablamos del tiempo como convención social,
hablamos del año que transcurre como una realidad tangible que nos da certeza;
“hoy es viernes 20 de diciembre del 2019”, año que esta transcurriendo y que no
se cumplirá en su totalidad hasta su 31 de diciembre, no fechamos un documento
escribiendo “2018 años, 12 meses y 20 días”. El tiempo entonces, aunque hay
quienes digan que es un invento, nos cimienta.
Este invento, en la cuenta en la que vivimos la mayoría de
los habitantes del planeta, inicio en el año uno, calculado y establecido a
partir del nacimiento de Jesucristo (aunque en realidad la datación esta
desfazada, dicen los expertos, por tres o cuatro años); la cuenta al tiempo
transcurrido antes de ese acontecimiento se comenzó a realizar en números
negativos para evitar confusiones. El inicio pues de este tiempo que vivimos
inicio en el año uno, no en el año cero, el cual no existe; es decir, el año
anterior al nacimiento de Jesús de Nazaret es el año menos uno. Por lo tanto, la
primera década del tiempo después de Cristo, el tiempo moderno, terminó en el
año 10 dando paso a la segunda década a partir del año 11 para cumplirse en el
año 20. Sin embargo, otra convención que vale la pena mencionar es aquella en
la que culturalmente contamos las décadas a partir del año cero, el cual les da
nombre: la década de los 70’s, por ejemplo. En estos casos el año cero se
vuelve el inicio y se concluye el análisis respectivo –casi siempre sobre los
acontecimientos determinantes en la historia, o la música, el cine y la
literatura producida en esos años buscando puntos de encuentro que generen o
continúen con una corriente determinada, etc.– en el año 9, de tal manera que
desde un punto de vista conceptual la segunda década de siglo XXI estaría
terminando junto con el 2019.
Entonces, durante los últimos días han comenzado ya a
proliferar comentarios, análisis y cronologías para conmemorar el final de la
década y, aunque estemos de acuerdo o no por lo antes anotado, es sin duda un
buen momento para la reflexión y el recuento. No logro librar la tentación de
unirme a estos recuentos considerando que, equivocados o no, este tipo de
celebración muestra la necesidad que tenemos los seres humanos de explicarnos a
nosotros a partir de la memoria que tenemos de los sucesos que consideramos
importantes. No me dedicaré a los sucesos más alejados ocurridos en enero, ni
siquiera los ocurridos a principios de noviembre, solo de aquellos que en las
últimas semanas han llamado mi atención y que por cuestiones de espacio, o mera
distracción de quien esto escribe, no había tenido oportunidad de desmenuzar en
este espacio.
Pero tendré que iniciar con este recorrido personal de fin de
año la próxima semana pues la perorata sobre cuando termina “realmente” la
década me ha tomado mucho tiempo. ¿O será otro de esos actos fallidos a los que
nos socorremos los escritores cuando queremos llenar espacio, temerosos de
encarar lo que en verdad deseamos decir? Vaya uste’a saber.
Paso cebra
Por ahora interrumpo este ¿análisis?, para desearle una
placentera Noche Buena y una gozosa Natividad en compañía de sus seres más
queridos, con el deseo de que nos encontramos el próximo viernes en la última
entrega de esta columna correspondiente a 2019. Muchas felicidades.
A tech writer who is passionate to write about streaming devices and its channel programs. Apart from my work, I am interested in music and sketching. Are you a person who needs updates about the new releases and is interested in tech blogs roku.com/link The Roku device can be activated by using an activation code. But first you will have to carry on with the setup process. Begin the setup process by connecting the cables to their respective ports. Then turn ON the streaming device and connect it to a firm internet facility. Now you can add the required channels using how to link roku to account to explore and enjoy. So, if you face problems while activating the streaming device then report your queries to the technical team on roku.com/link to enter code who are always ready to provide you with solutions
ResponderBorraralso refer how to activate roku also