viernes, 29 de agosto de 2008

Vero Ituarte hoy en "Animal Nocturno"

Este viernes 29 de agosto de 2008, Verónica Ituarte estará como invitada al programa Animal Nocturno, conducido por el periodista Ricardo Rocha. La emisión del programa inicia a las 12 de la noche, por TV Azteca, canal 13.
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jueves, 21 de agosto de 2008

Don Gabriel Vargas recibe Homenaje en Hidalgo

Francisco Curiel
Sol de Hidalgo


Entre otras de las actividades preponderantes de la 21 Feria Universitaria del Libro, se encuentra el homenaje a Gabriel Vargas Bernal, creador de la famosa tira cómica La Familia Burrón.

Se trata de un caricaturista, orgullo de los hidalguenses, quien con su fino humor deja al descubierto los aspectos de la típica sociedad mexicana contemporánea.Sus personajes son el retrato de las vivencias citadinas con toda la carga colorida de dichos y modales que proyectan el imaginario colectivo de décadas pasadas.

Gabriel Vargas nació el 24 de marzo de 1918, en Tulancingo, Hidalgo. Acababa de cumplir 4 años de edad cuando llegó a vivir a lo que hoy se denomina Centro Histórico y en aquel tiempo era toda la Ciudad de México. Comenzaba la década de los 20. Le tocó vivir y atestiguar la ciudad de vecindades y pulquerías, perros famélicos y limosneros, desocupados y malvivientes, inundaciones y hambre.Gabriel, mientras cursaba la primaria, se caracterizaba por ser el alumno más travieso del plantel, lo que ocasionaba a su madre constantes disgustos y, a él, raras crisis de conciencia.

Precoz hasta la exasperación, el niño no tuvo dificultad para ganarse el aprecio de los habitantes del barrio y descubrir, antes de cumplir los 12 años, que su habilidad para trasplantar la realidad al papel, en forma de graciosa dibujo, era portentosa.En 1930, parra celebrar "El Día del Tráfico", realizó en tinta china un dibujo de la avenida Juárez, con todo y anuncios publicitarios, en el cual aparecían vehículos, carretas, y más de 5 mil figuras humanas perfectamente delineadas y que dejó a sus maestros sorprendidos.

Esto es sólo parte de los comentarios que algunos biógrafos refieren en torno al personaje que, con creatividad y talento, ha dejado constancia de sus relatos, imágenes también del folklor mexicano.

martes, 19 de agosto de 2008

Presentación frustrada

El día de ayer estaba invitado a presentar el trabajo de caligramas de la poeta poblana pero afincada en Hidalgo, Alejandra Craules Bretón. Dicho trabajo sería expuesto como parte la XXI Fería Universitaria del Libro. Sin embargo no tuvimos confirmación y no se realizó. Esperemos que sí se haga, pues el trabajo de Craules en los caligramas es verdaderamente extraordinario. Abajo les dejo el texto que espero poder leer en los siguientes días.

¿Qué forma tiene la poesía?: Notas sobre los caligramas de Alejandra Craules Bretón

Recuerdo la primera vez que leí un caligrama. Tenía catorce años y tomaba mi primer curso de poesía con el extinto Luis Ignacio Helgera, al cual por cierto se le hecha mucho de menos. Se trataba de un caligrama de Julio Torri, estudiábamos la poesía en prosa mexicana y Torri aparecía como uno de los principales exponentes. Aquel era un caligrama sobre la luna, ennegrecida por las letras pero reluciente por como era descrita. El tema me interesó sobre manera, la posibilidad de dibujar sobre una hoja de papel con las palabras, más allá de su naturaleza de signo, me cautivó. Vale la pena recordar que el signo lingüístico escrito, es decir la letra, tiene como principal misión la de representar gráficamente un sonido. Sin embargo como es habitual, algunos escritores no se conforman con esa simple posibilidad, por el contrario, buscan que el conjunto de esas letras en palabras, de esas palabras en oraciones y de esas oraciones en párrafos, formen sobre el papel una imagen que en si misma tiene un sentido, más allá del sentido interno del poema, quiero decir, del tema que trate.

¿Pero qué es exactamente un caligrama? El caligrama es poesía para mirar. En el caligrama el poema dibuja un objeto relacionado con el tema principal del mismo poema. Por ejemplo, si el poema habla de una mesa, se escribe o acomoda el texto en forma de mesa. Esta manera de presentar el texto de un poema tiene su origen mismo en la materia primigenia del lenguaje escrito; es decir, en un principio la escritura fue de carácter pictográfico, ideográfico o una combinación de ambos. Tiempo después se formaron los alfabetos unificando los signos que representaban sonidos y las palabras que representaban conceptos.

Los primeros caligramas conocidos pertenecen a los poetas griegos del periodo helenístico, entre los siglos IV y III a. C.) En aquellos tiempos a la forma se le conocía como “technopaegnia” y en latín eran conocidos como “Carmina figurata”. Los primeros autores “caligramístas” fueron Simias de Rodas, Teócrito y Dosiadas. Desde ese momento hasta el siglo XX esta forma poética ha tenido un tratamiento continuado, aunque desigual, con periodos de auge como el que experimenta desde el inicio de la vanguardia. Es en este periodo en el que el poeta vanguardista Guillaume Apollinaire se convirtió en un famoso creador de caligramas. Fue él quien idealiza el verso libre rompiendo toda estructura hasta entonces conocida y representa la imagen del discurso dibujándola con las propias palabras del poema.

La poesía en castellano ha tenido grandes creadores de caligramas. El poeta chileno Vicente Huidobro incluyó su primer caligrama, titulado “Triángulo armónico” en su libro Canciones en la noche de 1913. También el mexicano Juan José Tablada, el cubano Guillermo Cabreara Infante, el argentino Oliverio Girando o el uruguayo Francisco Acuña de Figueroa crearon caligramas extraordinarios.

Como podrá imaginarse el arte del caligrama ha evolucionado de su hechura artesanal, a una más sencilla y casi automática. Inicialmente con tinta, pluma y papel se daba forma a los dibujos que en sus viseras guardaban las palabras del poema, tiempo después, el uso de la máquina de escribir refresco la manera en que el acomodo de las palabras formaban las figuras, permitiendo no solamente mejor legibilidad, sino también más cantidad de texto en sus entrañas. Es la computadora y los procesadores de palabras que impactan fuertemente en la hechura del caligrama. En tiempo de modernidad computacional parecería que acomodar palabras creando formas es simplemente obra de un clic. Es tal vez por eso que los poetas afectos a esta combinación de literatura y arte visual, ha vuelto a los orígenes. El riesgo de abusar de la tecnóloga que facilita el dibujar formas pensables e impensables como un texto ha exigido que la tinta y el papel vuelvan a dar rienda suelta a la creatividad.

Este es el caso de Alejandra Craules Bretón. Poeta de imágenes sórdidas y apocalípticas, de música suave y cadenciosa. Beligerante de lo íntimo nos encierra en una serie de laberintos en los que seguramente seremos el minotauro y no Teseo. Disfrutando del poder magnánimo, casi de dios, que la poesía permite, nos enseña las formas que navegan en su mente y que hemos olvidado en toda su belleza y concisión.




Laberinto no. 18

El tiempo
callado
Acento
extraño
Aliento
penetra emociones
Inquieto
tacto de viento
Moreno
perfecto eclipsa
mi vientre lácteo

En este caligrama las palabras son las paredes de un laberinto que nos enfrenta en cada quiebre a lo que el poema escupe. Nos restriega en el rostro la imposibilidad absoluta de salir de él impolutos, sin heridas. No podemos más que aspirara al rol del minotauro, jamás al de Teseo. La irregularidad de los diferentes papeles en que Craules Bretón trabajó los caligramas, sugieren una suerte de diario de viaje llevado en servilletas, trozos de papel, papeles reciclados negados a morir, etc. En ellos la espontaneidad y la sorpresa al descubrir como si fuera por vez primera el mundo que nos rodea esta latente. Renombrar las cosas mostrando también las formas que tiene al más puro estilo del viajero que plasma en su diario lo que en la lejanía ha encontrado y esta deseoso de mostrar en el mundo conocido.



Laberinto no. 19 (del amor o del masoquismo)

Blanca o jaspeada
en tierras lejanas
quizá nórdicas o mediterráneas
desplegaste tus alas
Aquí
pequeña ciudad
tercermundista
muda y en ruinas
tu faz cambia
tu nombre no es el mismo
tu aliento no aviva sueños apagados
¿Para qué aleteaste mariposa?
¿Para qué despertaste
de tu sueño de crisálida?
Con los ojos en llamas
y las manos atadas
a unos pétalos secos
en medio de mis palabras
Ahora soy
la prometida del caos
enredada
entre sus puños sangrantes
aguardo indulgencia


Una mariposa aletea dentro de este caligrama, en el que la forma arquetípica de lo bello, la naturaleza y la alegría de vida, contrasta con el hastío y la desolación que el tema del poema encierra. Una mariposa que más que ver volar valdría más la pena apedrear.

Alejandra Craules se posiciona, con esta experiencia, como una poeta arrojada y sin ataduras, ni estilísticas, ni de forma; ha encontrado a base de impetuosidad una voz propia dentro y fuera de sus textos. Va un paso adelante no solamente de los poetas que habitamos esta tierra, sino de muchos poetas de nuestra generación, marcha a la par de muchos poetas extranjeros que han encontrado en la poesía una travesía de vida, una forma de respirar. Es en la poesía visual y experimental en que los caligramas han germinado en este nuevo siglo. El convertir al poema y la hoja en que habita en una experiencia que involucre, si es posible, todos los sentidos, es su mayor apuesta. Es con ellos, con los sentidos completos, con los que se deben “leer” los caligramas de Alejandra Craules Bretón.
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Pachuca de Soto, Hidalgo. 18 de agosto de 2008

lunes, 18 de agosto de 2008

A razón de "Peregrinaje de Voces"*

Toda traducción es imposible, ya se sabe. Y por si esto fuera poco también la poesía es imposible. Ambas imposibles como imposibles los milagros que suceden en lo cotidianos cuando alguien se salva de la inminente muerte o aparece algo divino en el lugar más profano del planeta. Que lugar más profano que una hoja de papel, razón de sacrificio de no sé que cantidad de árboles; o una pantalla latente de computadora, donde suelen aparecer con más frecuencia cosas frívolas y horrendas. Es ahí donde a diario atisbamos con versos hasta crear poesía, algunas veces – las pocas –, con buena fortuna. Es por todo lo anteriormente dicho que no hay milagro más “milagroso” que traducir poesía. Darle un camino más al peregrinar de la palabra para que transite también por nuestros lares lingüísticos y nos permita así completar el milagro para el que fue convocada.
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*Nota introductoria para la columna Peregrinaje de voces que aparece en la revista zacatecana La Cabeza del Moro.

La Cabeza del Moro 12


Apareció ya el número 12 de la revista zacatecana La Cabeza del Moro. En ella se incluye una columna de traducción que he empezado a escribir llamada Peregrinaje de voces. En esta ocasión reseño a Derek Walcott y traduzco dos de sus poemas. La pueden adquirir por solamente 20 pesos en cualquier librería EDUCAL del país.

viernes, 15 de agosto de 2008

Publican en Montevideo nuevo libro de poemas de Benedetti

Testigo de uno mismo, el último libro de poemas del escritor uruguayo Mario Benedetti, propone revisar "la larga sucesión de cosechas" de "nuestra modesta vida" hasta "volver a ser semillas". Testigo de uno mismo se suma a la extensa producción del escritor uruguayo, iniciada en 1949 con la aparición de su primer libro de cuentos Esta mañana, que prosiguió al año siguiente con sus poemas de Sólo mientras tanto. "Somos pasajeros de la vida/pero como bien dijo el sabio Pessoa/viven en nosotros innumerables otros/por eso compartimos el mismo tren/igual destino/ paisajes inmutables", escribe en Pasajeros. En Ausencias pide "quiero encontrarme con mis ausentes/con mi pasado/con mi presagio de futuro/con los más próximos de mis prójimos/con los que usamos la misma ruta y compartimos la sed y el hambre". "¿Dónde estarán mis desaparecidos?/le exijo al mundo de los extraños que me los traigan que yo los vea", invoca el escritor uruguayo, nacido en 1920 y que transcurrió su exilio en la década del 70 entre Buenos Aires, Lima, La Habana y Madrid.
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De la música y cuestiones peores

En mi pueblo se canta cuando alguien nace, una canción que trae buena suerte para el recién venido. La tonada empieza con su primer llanto y de su intensidad depende la fuerza con que se entona. En mi pueblo se canta cuando dos corazones se eligen mutuamente para la eternidad, hasta que el anochecer se vuelve el escondite perfecto para su unión; se abandonan al ritmo que junta sus cuerpos hasta confundirlos con la sincopa de la siembra. También cuando alguien muere se canta. Los dolientes se reúnen en torno al cuerpo y en lugar de chillar, juntos corean las canciones que el difunto prefería en vida; si alguien sólo tararea lo miran con lástima pues nunca conoció realmente al muerto.

Los pájaros, el río. Los árboles, el viento. Todo canta su propia música, sobre todo, en las orillas del día. Pero nada se escucha tan bien como el silencio. Tan nítido y estruendoso como la nada que me ha impedido ser testigo presencial de todo esto que les digo.

jueves, 7 de agosto de 2008

Verónica Ituarte mañana en Pachuquilla

Verónica Ituarte se presentará en concierto el día viernes 8 de agosto de 2008, en Pachuquilla, Hidalgo, cabezera del Municipio Mineral de La Reforma, conurbado de la ciudad de Pachuca. La presentación será en el teatro 'Chiconecoatl' ubicado en la plaza principal. La cita es a las 19:00 horas y la entrada es libre.
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Verónica Ituarte estudió canto clásico en la Escuela Nacional de Música de la U.N.A.M. y jazz en la Escuela Superior de música del I.N.B.A. Al mismo tiempo participa en el Coro de la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México.

Se inicia en el jazz, invitada por el Pianista Juan José Calatayud, participando en innumerables conciertos en todo el pais. Además de su trabajo como solista, Verónica continuó presentándose con el Maestro Calatayud, hasta el lamentable deceso del jazzista en el 2003.

Verónica se ha presentado en la Sala Manuel M. Ponce y sala principal del Palacio de Bellas Artes, Auditorio Nacional, Sala Nezahualcóyotl, Centro Nacional de las Artes, Teatro de la Paz, S.L.P., Teatro del Estado de Xalapa, Teatro Angela Peralta, San Miguel de Allende; Zócalo capitalino en el DF; por mencionar algunos y también en el extranjero en la ciudad de Mineapolis, MN, USA (1995).

Ha participado en múltiples festivales, solo por citar los más recientes: "Festival de Noche de Primavera" D.F. (2005), “Jazzistas en Blues”, México DF 2005, “Festival de jazz de Cd. Del Carmen 2006”, Campeche; “Festival Internacional Mérida 2007”; “Festival Coyote Jazz 2008”, D.F.;“Festival Nacional de jazz 2008”, D.F., “Festival Cultural Internacional Zacatecas 2008”.
Ha cantado para abrir conciertos de personalidades internacionales como Oscar Peterson (1989). Participa como integrante del ensamble vocal “Cuicanitl” dirigido por Irradia Noriega y abren el concierto de B.B. King en México (1996).

Verónica ha trabajado al lado de músicos como Juan José Calatayud, Mario Ruiz Armengol, Roberto Pérez Vázquez, Vicente Garrido, Tomás Rodríguez, Agustín Bernal, Francisco Téllez, Alejandro Campos, Enrique Nery, Baldomero Jiménez, Arturo Luna, Iraida Noriega, Patricia Carrión y Tere Estrada.

Ha grabado como solista: "Verónica Ituarte en vivo desde del Museo del Chopo" (Arka 1997), "Alucinaciones" (IngeniArte 1998), "JAZZentiste..." (IngeniArte 2001), "Juguetería" (IngeniArte 2004) y “Enteramente para mi” (IngeniArte 2007). También ha participado en las grabaciones: "Festi-Jazz Vol. 2" (Discos Pueblo 1988), "Treinta Años con Juan José Calatayud" (OMICRON-UNAM 1993), "Cuicanitl" (JazzCat 1999), "Jazz project the Waves of the swing sounds" Tommy's Super Big Band, Tomás Rodríguez (Actus-Café Caliente 2003) y "MEF" Mujeres en Fuga (Pentagrama 2004).

La Ituarte es referida como una cantante de jazz de relevancia, en cinco libros publicados: "Historia de la música popular mexicana" de Yolanda Moreno Rivas, "Tiempo de solos, 50 jazzistas mexicanos" por Fernando Aceves y Sergio Monsalvo, "El Jazz en México, Datos para una Historia", por Alain Derbez y "De la libertad en pequeñas dosis, notas del jazz nacional" y “Catálogo casi razonado del jazz en México” por Antonio Malacara Palacios.

martes, 5 de agosto de 2008

Desesperar

Larga es la espera, lentos los días. sólo el cuerpo tibio de la mujer amada consuela las noches aciagas.